Si quiere que sus obras sean bendecidas, si quiere ver resultados sobrenaturales en su vida, tendrá que hacer algo más que simplemente leer la Palabra de Dios. Usted tendrá que ponerla en práctica.
Por ejemplo, cuando entendí que la Palabra de Dios me enseña a diezmar, Gloria y yo ya estábamos tratando de rendir al máximo el poco dinero que teníamos. Estábamos endeudados hasta la coronilla. No podíamos darnos el lujo de dar el diez por ciento, pero de todas maneras lo hicimos.
Decidimos andar por la fe y nos mantuvimos firmes en la decisión de cumplir todo mandato que veíamos. En poco tiempo comenzamos a ver un aumento en nuestras ingresos.
No deje de leer y estudiar la Biblia, escuche cintas de enseñanzas, vaya a la iglesia y escuche la predicación de la Palabra. Pero no se detenga ahí; dé un paso muy importante: ponga en práctica la Palabra que ha escuchado y aprendido.
Escritura Devocional : Mateo 7:17-27
Por: Kenneth Copeland