¿Quién nos hizo? La Biblia, la Palabra de Dios, nos dice cómo comenzó la raza humana. Hace mucho tiempo, Dios hizo el primer hombre, y le llamó Adán. Dios hizo a Adán del polvo de la tierra. Cuando Dios le sopló vida a Adán, vivió. Se encontró en un hermoso huerto llamado Edén
Abra su Biblia, pregúntele a su hijo dónde es el mejor lugar para comenzar a leer un libro. Explique que en el comienzo de la Biblia habla sobre el comienzo de nuestro mundo.
Pregúntele a su hijo: “¿Qué es nada?” Explique que al principio, antes de que el mundo surgiera, el mundo era oscuro, sin forma y vacío. Pregúntele a su hijo si alguna vez hizo algo con sus manos. Seleccione un proyecto u oficio particular que hayan realizado.
Hable sobre por qué le gustó hacerlo. Pídale que le cuente cómo surgió. Señale que usaron materiales para crear su oficio. Recuérdele que los humanos siempre necesitan algo para comenzar una tarea. No podemos crear de la nada. Señale que en este momento está utilizando su mente y boca para transmitirles una lección.
Muéstreles la Biblia y hable acerca de cómo se lo hizo con papel y tinta. Luego habla sobre cómo Dios creó el mundo de la nada. Él simplemente habló y todo surgió. Pídale a su hijo que trate de decir algo a la existencia. Señale que Dios es muy poderoso para poder usar palabras para crear el mundo. Si lo desea, puede representar la historia de la creación a medida que la lee.
Tendrá que reunir algunos suministros.
Comience sentándose en la oscuridad. Cuando Dios
haga que la luz exista, haga que su hijo encienda una linterna. Haga que
enciendan un ventilador cuando Dios crea separa el aire del agua. Continúe
usando representaciones simples como animales de peluche o calcomanías de
estrellas para representar el mundo. A medida que continúe, señale cuántas veces
Dios dice que el mundo es muy bueno.